George Méliès tomó recursos estilísticos y efectos especiales del teatro para sus películas. Realizaba trucos de magia y diversos efectos visuales: hacía desaparecer, cambiaba el tamaño de cabezas... Seguían sin utilizarse movimientos de cámara. Su obra cumbre es Viaje a la Luna, en la que se solapan distintos escenarios teatrales. Segundo Chomón (director de cine aragonés) se inspiró en Méliès para la realización de sus filmes, como por ejemplo: La mansión encantada.